Compañía Antonio Gades
Precio: De 5 a 25 €
Horarios de funciones:
Jueves, 15 de diciembre, a las 20.00 h.
Viernes, 16 de diciembre, a las 20.00 h.
Sábado, 17 de diciembre, a las 20.00 h.
Domingo, 18 de diciembre, a las 19.00 h.
Duración: 70 minutos
Espectáculo recomendado para todos los públicos
Precios: de 5 a 25 €
FUEGO
COMPAÑIA ANTONIO GADES
Coincidiendo con el décimo aniversario del fallecimiento de Antonio Gades, la Fundación que lleva su nombre, se dispuso a acometer un reto de especial trascendencia: poner en pie la versión de El Amor Brujo que, con el título de Fuego, supuso el segundo acercamiento escénico del coreógrafo alicantino al ballet de Manuel de Falla.
Exponente del más puro sello Gades: volver a la tradición si se quiere evolucionar, es este ballet una obra de transición entre los ya míticos montajes de Carmen y Fuenteovejuna. Fue también la última de las colaboraciones del ya mítico tándem difusor del flamenco Gades-Saura, y siguió la misma pauta que habían seguido con Carmen: primero película y después ballet. a propósito de esto, decía Gades que: …La versión escénica es muy diferente a la cinematográfica. Carlos y yo contamos otra historia. Nos servimos de la banda sonora del film cantada por Rocío Jurado con la Orquesta Nacional de España, bajo la dirección del maestro Jesús López Cobos, pero cambiamos el orden de los extractos a los que yo he añadido flamenco y numerosas músicas populares que no figuran en el film…
Volviendo a la génesis de la obra, es importante saber que el coreógrafo venía de atravesar una dificilísima situación personal. a la ruptura con la que fue hasta entonces su esposa, Pepa Flores, se une el fallecimiento de su padre y la trágica muerte de su hermano Enrique, quien hasta entonces había sido parte de la Compañía.
Cansado también por las incesantes giras de su ballet alrededor del mundo, decide alejarse de los escenarios. Inicia entonces un periodo de reflexión y descanso, que finaliza en 1989, reclamado por varios proyectos artísticos entre los que se encuentra la inauguración de la Ópera de El Cairo, la participación en la conmemoración de los diez años de la creación del Ballet Nacional de España y, lo que supuso la piedra de toque definitivo, el encargo por parte del Teatro Chätelet de París para realizar el estreno del ballet Fuego. El estado de ánimo de Antonio Gades se refleja en la obra que intenta escapar de la fantasía del guión original contando la historia de una enajenación mental y rodeándola de una ambientación onírica y tenebrosa.
Estrenada en 1989, Fuego cautivó al público parisiense que presenció las primeras interpretaciones del ballet. Una extensa gira por Francia, Italia, Alemania, Suiza, Japón y Brasil, siguió al estreno. Pero Antonio Gades no se había recuperado plenamente y seguía en la búsqueda del equilibrio que necesitaba para enfrentarse al escenario y la energía para poder llevar y dirigir una compañía. Quiere volver a encontrarse plenamente con el mar y con la vida, donde encuentra la fuerza y la inspiración que como trabajador del arte necesita. Así las cosas, la obra nunca fue estrenada en España. Lo breve de su existencia nos permite acercarnos hoy a una obra de Gades casi como si fuera la primera vez. Muchos de los recursos allí puestos en escena nunca han sido repetidos, y constituyen hoy una sorpresa que hacen que la obra mantenga su frescura.
Antonio Gades supo rodearse de grandes profesionales para trabajar conjuntamente en la ejecución de su espectáculo: Carlos Saura, Gerardo Vera, el maestro Jesús López Cobos, Rocío Jurado, son algunos de los importantes nombres que se conjugaron para esta versión escénica de El Amor Brujo. Además, durante el montaje, contó como maestro de baile con Goyo Montero, el iluminador francés Dominique You y la que hoy es la Directora Artística de la Compañía, Stella Arauzo.
El estreno absoluto de Fuego en España tuvo lugar el 6 de julio en el Teatro de la Zarzuela y contó con la participación de la Orquesta de la Comunidad de Madrid, dirigida por el maestro Miguel Ortega. Cuantos trabajamos en esta recuperación pusimos toda nuestra ilusión, nuestro conocimiento, nuestra historia, nuestro trabajo, y, sobre todo, eso que nos une a gentes del mundo entero, y que hace que la danza esté aún presente pese a los momentos de enorme dificultad que atraviesa: la pasión por uno de los lenguajes más auténticamente universales: el ballet.